Verdi según la Fura del Baus
Teatro Colón
Miercoles 4 de diciembre de 2013
Escribe: Néstor Echevarría
Corresponsal para La Revista Sinfónica de Montevideo.
    
Gustavo  III  - Giuseppe  Gipali
      Conde  Ackarstrom -  Fabián Veloz,
      Amelia -  Virginia Tola
      Oscar - ,  Sussana Andersson,
      Ulrica -  Elisabetta Fiorillo,
      Conde Horn -  Lucas Debevec Mayer,
      Conde Ribbing  -  Fernando Radó 
      Cristiano -  Leonardo Estévez    
 Video de  Emmanuel Carlier,
      iluminación de Urs Schönebaum,
      Escenografía de Alfons Flores
      Vestuario de Lluc Castells  
      “régie” de Alex Ollé y Valentina Carrasco.
      Coro (Miguel Martínez) y Orquesta Estables del  Teatro Colón (Ira Levin)    
En este despacho me ocupa la versión de “Un ballo in maschera” de Giuseppe Verdi que fue destinada al cierre de la reciente temporada .Y naturalmente que la misma puede dejar mucha tela para cortar, como suele decirse habitualmente, al tratarse de una realización escénica de “La Fura dels Baus”, el grupo catalán bien conocido en Montevideo por su participación en el Solís.
    Pero  seria innegable que  para hablar de la  propuesta “furera” para esta conocida ópera verdiana,  el analista   y crítico debe desembocar en el concepto filosófico y particular del  proponente, en este caso uno de sus fundadores y directores artísticos, nacido  en Barcelona en 1960.
    Hablo  de Alex Ollé, quien expresa  su adhesión  a la visión “orwelliana” ,en referencia al universo ideológico de George Orwell  (1903-1950) , el escritor y periodista británico que expresó sus experiencias  y que mucho influyeron en el régisseur de La  Fura al expresar –con sus  propias  palabras-  que “el poder se ha cerrado  sobre si mismo, en una forma evolucionada de un nuevo absolutismo o de un  totalitarismo refundado.” Agregando: “Estamos en un mundo protegido tras  gruesas paredes de cemento armado. El poder,los burócratas, los financieros,  aquellos que hayan sobrevivido al colapso económico ¿vivirán ocultos a la  sociedad? A su alrededor,como sombras, los excluidos ,“The Protester”,la  indignacion del mundo” (Firmado :Alex Ollé ,de La Fura dels Baus).
    Claro  que toda esta tesis ideológica (que no se advirtió de igual manera en ocasiones  anteriores de puestas de la Fura en el Colón  ( “El gran macabro”, de Ligeti, y “Edipo” de  Enescu ) , que he comentado de las temporadas anteriores en estas  páginas, llevadas al terreno verdiano en este  caso, y el hecho del asesinato del rey Gustavo III de Suecia (hecho real que  dio motivación a la ópera, extraída de un texto de Scribe  , propuesto a Verdi por Antonio Somma, su  libretista) tendió mucho más a la visión “orwelliana” antes descripta por el  motivo del argumento y el tema.
    El  motivo central es la máscara, que presentan todos los personajes,de civil y  ropa actual,en el vestuario monocromo de Lluc Castels, en una escenografía de  tinte fascista  por lo monumentalista y  esquemática , de Alfons Flores y con la estudiada iluminación de Urs  Schonenbaum, tienen esa tipología, desde el primer acto  hasta desembocar en la inesperada cámara de  gas venenoso que aniquila a los concurrentes  “al ballo in maschera” luego del asesinato de  Ricardo/Gustavo III como un cierre electrizante (por cierto que nada tiene que  ver con el contexto histórico real, sino es simbólico y antojadizo).
    Esta  producción, ofrecida ya en la icónica Sydney Opera House, en enero último, en  La Monnaie de Bruselas y en Oslo,   llegó  entonces al Colón dirigida por el norteamericano Ira Levin, con efectividad,  con el debut de los cantantes Giuseppe Gipali, de origen alsaciano, un tenor de  correcta musicalidad pero de escaso volumen vocal (su pequeña voz la absorbía  aun mas  el gran vacio superior que  dejaba la escenografía) y personalidad bastante anodina.
    También  debutante aquí fue la mezzo italiana Elisabetta Fiorillo, que  impresionó por su volumen y efectividad vocal  como Ulrica, lo mismo que la soprano  sueca Susanna Anderson, que  dio relieve y musicalidad al paje Oscar, en  tanto Virginia Tola  soprano nacida en la  provincia de Santa Fe,compuso  una  Amelia  de buen material como ella tiene  pero necesitada de mayor compenetración en el personaje.
    Por  otra parte, fue excelente el Renato del barítono bonaerense –de la localidad de  Ayacucho- Fabián Veloz (cantó el “Eri tu” con nobleza vocal y  convicción) , efectivo el cometido de los conspiradores  ( los bajos Lucas Debevec-Mayer y Fernando Radó) y eficaz Leonardo Estévez, así  como competente el coro estable del teatro dirigido por Miguel Martínez.
      
      El estreno,demorado por un lamentable accidente en los ensayos que significó la  muerte de un operario al caer  desde 14  metros de altura, creó la expectativa imaginable por la puesta del  afamado grupo catalán, y a la hora de los  aplausos finales de todo el elenco, cuando salió Alex Ollé y sus colaboradores,  un abucheo también previsible por la desafiante puesta vanguardista y  transgresora, se sumó en la velada de estreno.
      Claro  que si pensamos en la  carrera  prestigiosa y de éxitos de La Fura dels Baus, grupo creado en 1979, esto no  puede ni debe sorprender a quienes analizamos su labor. Diria que están  habituados . Pero será la historia misma, la que sedimenta y tamiza todo en la  vida, quien sentencie su perdurabilidad en estas intervenciones operísticas.

