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“El Mesías“ de Haendel

                                    

Teatro Colón

Miércoles 15 de Abril de 2015

 

escribe:  Néstor Echevarría

 

 

 “El Mesías”HWV 56, oratorio en tres partes , de Georg Friedrich Haendel


Bach-Academie Stuttgart y el Bach Collegium-Gaghinger Kantorei
Dirigidos por Hans Christian Rademann .

Solistas vocales: Johanna Winkel, Ann Beth Solvang,Sebastian Kohlhepp y Markus Eiche.

Función del Mozarteum Argenbtino . Teatro Colón, miércoles 15.

 

La distinguida agrupación alemana Bach-Akademie Stuttgart y el coro del Bach Collegium-Gachinger Kantorei que el Mozarteum Argentino presentó en el inicio de su  nueva temporada, tuvo la interesante propuesta de armar sus dos programas con  grandes personalidades de la creación musical coincidentes en su año de nacimiento y de ribetes opuestos.


Porque nacida para homenajear fundamentalmente al coloso Juan Sebastian Bach, surgida por el empuje y talento de su fundador Helmuth Rilling , también en el segundo programa hizo su homenaje a Georg Friedrich Haendel, que también vio la luz  en 1685 (en esa suerte de “annus mirabilis”de la historia musical) en la ciudad de  Halle, Sajonia.


Personalidad diferente por oposición y genial también por su talento y producción, Haendel –que  sobrevivió nueve años a su colega, falleciendo en Londres en 1759- fue criado en el mismo ambiente del protestantismo aunque siguió un derrotero diferente.


Marchó hacia Inglaterra, que por cierto puede considerarse su segunda patria y donde fue ciudadano (por ello la adhesión incondicional de los ingleses) y allí desarrolló una brillante carrera, en un principio operística  donde su abundante producción de  óperas  siguen siendo un referente de inmensa valía  del periodo barroco)  y luego focalizada en la construcción de imponentes oratorios, de amplia trascendencia, un género donde dominó por doquier.


Y si Bach sintetiza el pasado y la religiosidad luterana así como la  absoluta maestría del contrapunto,  Haendel se abraza a un presente privilegiando el lenguaje armónico y sus expresiones son de tipo profano  con frecuencia.. Beethoven llegó a decir “ Vayan a aprender de él, ese arte de lograr grandes efectos con medios simples”. Y Haydn ,cuando escuchó el “Aleluya” de “El Mesías” en la Abadía de Westminster de Londres proclamó: “es el maestro de todos nosotros…”


Pues bien, en la ejecución de este  admirable oratorio “El Mesías” en el Colón, en la función que comentamos, pudo volver a advertirse  esa condición y característica de que la mesura y el recato parecieron ser los parámetros con que el maestro Hans Christoph Rademann (a cargo de ambos ensambles, el instrumental y el coral, desde 2013 ) aborda el repertorio, con solvencia  innegable, pero con una intencionalidad intimista propia y característica.


Llevada esta conceptualización al  “Mesías” haendeliano, puede decirse que su exposición (reducida esta versión de sus  52 números a 48)  exhibió  un justo y preciso lenguaje expositivo pero cierta carencia de contrastes, de claroscuros, atendiendo al admirable efecto que Haendel propone y las posibilidades inmanentes a su lenguaje sonoro.con arias,recitativos y coros como el exultante “Aleluya” del final de la segunda parte.
El desempeño del coro de una  treintena de voces fue por su parte lucida  ,con  cuidada afinación e impecable en las líneas polifónicas, y los solistas , de voces también  medianas en volumen, mostraron  buena formación estilística.


Se lucieron particularmente la soprano alemana Johanna Winkel y el expresivo bajo (en realidad un barítono muy vinculado a la opera) Markus Eiche, en tanto fueron   menos salientes aunque efectivos el tenor Sebastian  Kohlhepp y la mezzo noruega Ann Beth Solvang..

 

 

                                           Néstor Echevarría