Juventus Lyrica presentó Orfeo y Eurídice
Teatro Avenida, Buenos Aires,  Premiere
      Viernes 19 de agosto de 2016
Escribe: Graciela Morgenstern
Fotos: Juan Inglemo
Ópera en tres actos (versión de1762)
      Música: Christoph Willibald. Gluck (1750-1787)
      Libreto: Rainiero de Calzabigi
      Cantantes: Orfeo (contratenor), Martín Oro; Eurídice (soprano), María Goso;  Amor (soprano) Victoria Gaeta.  
      Orquesta de Juventus Lyrica
      Dirección musical: Hernán Schvartzman
      Coro de Juventus Lyrica
      Director del coro: Hernán Sánchez Arteaga
      Puesta en escena; dirección artística y vestuario: María Jaunarena
    Escenografía e iluminación: Gonzalo Córdova 
    Como  segundo título de su temporada 2016, presentó Orfeo ed Euridice, en su versión italiana.
Cuando la pareja imperial de los Habsburgo, María Teresa y Francisco I ingresaron al Burgtheater de Viena, el 5 de Octubre de 1762, para la premiere de Orfeo ed Euridice, de Christoph Willibald Gluck, seguramente esperaban ver un entretenimiento pastoral liviano. La ocasión – el día del santo del emperador – y la calificación de la obra como azione teatrale, prometía eso. Si bien la audiencia tuvo su final feliz, al menos durante los primeros dos actos, se encontraron con una obra de asombrosa intensidad y novedosa en la manera en que integraba un coro, solistas y ballet y que rompía la división entre recitativos y arias.
    El libretista, Ranieri de Calzabigi, era un ávido opositor a los “excesos” de la ópera italiana y sus ideas  se encuadraron perfectamente dentro de la búsqueda de Gluck, de la belleza  simple y la verdad dramática. Tomó entonces la historia del descenso de Orfeo  al Hades para rescatar a Eurídice y la redujo a lo esencial. Desde el doloroso  coro inicial, pasando por la oscuridad y la luz en el segundo acto, hasta el  famoso lamento  ‘Che farò senza  Euridice?’, Gluck creó un drama corto y desgarrador; un mito en los poderes  trascendentales de la música y un hito en la historia de la ópera.
    El rol  protagónico, compuesto originalmente para un castrato, ha sido asumido en  diversas oportunidades, por mezzo sopranos, contraltos, tenores con voces muy  agudas, barítonos y contratenores. Este último fue el caso en esta versión, en  la que Martín Oro mostró comprometerse con el conflicto que presenta el  personaje, con una actitud de angustia e introspección. Exhibió buen caudal vocal  aunque falta de apoyo en algunas notas, lo que redundó en una emisión despareja.  Sin embargo, llevó adelante la mayor parte del peso de la obra que pone  diversas exigencias al protagonista.
    María Goso se destacó en el personaje de  Eurídice, con tonos ricos y cálidos y confiada presencia escénica. Tanto su  desempeño escénico como musical revelaron intensidad dramática y estilo.
      La voz cristalina de Victoria Gaeta y su  desenvoltura actoral convergieron en una personificación brillante del amor. 
    El coro, si bien reducido en número, tiene  una participación muy relevante en esta ópera. El organismo de Juventus Lyrica,  bajo la dirección de Hernán Sánchez Arteaga, cumplió una labor muy meritoria,  mostrándose en su mejor forma.
    De la misma manera, Hernán Schvartzman  dirigió la orquesta utilizando tiempos vivaces e incorporó el sentido de  integridad, inteligencia, inspiración y buena técnica. Permitió una rica y  colorida gama sonora.  
      María Jaunarena presentó una puesta  creativa pero en desacuerdo con el texto y con la música. Con escenografía e  iluminación de Gonzalo Córdova y un vestuario neutro diseñado por ella misma,  introdujo una serie de actores recitando textos procedentes del orfismo. Y bajo  el trillado dogma de la universalidad de ciertos temas que son eternos,  entremezcló el viaje en busca de Eurídice con el tema de los recuerdos y la  memoria, agregando también, elementos modernos, contrapuestos con lo que se  expresa en el libreto. Si bien movió cantantes y actores con destreza, olvidó  algo fundamental: eso era una ópera. Al incluir la lectura de proyecciones  durante la ejecución musical, cometió un grave error.  De todos modos, su puesta fue de laboriosa  factura.
      Muy interesante, para concluir, la idea de  Juventus Lyrica de ofrecer "Orfeo ed Euridice2, una obra que no se ve muy a  menudo en la cartelera porteña.



