Recital lírico en Villa Gainza Paz
Villa Gainza Paz, Mar del Plata
Sábado 7 de Octubre de 2018
Escribe: Eduardo Balestena
      El 7 de  octubre tuvo lugar en la Villa Gainza Paz, de la ciudad de Mar del Plata, un  concierto lírico con la actuación de la soprano María Belén Rivarola, el tenor  Miguel Ángel Silva Macías y el maestro Horacio Soria al piano.
      El programa estuvo integrado en su  primera parte por canciones del compositor argentino Carlos Guastavino: “La  rosa y el sauce”, “Riqueza” y “Ya me voy a retirar”; “Les chemins de l ´amour,  de Francis Poulenc; “Ouvre ton coeur”, de Georges Bizet y “Le filles de Cadix”  de Leo Delibes.
      Tras el intervalo, fueron abordados  arias de ópera, opereta y canciones: “Io son l'umile Ancella”, de Adriana  Lecouvreur, de Francesco Cilea; “E la solita storia del pastore”, de La  Arlesiana, de Cilea; “Depuis le jour”, de Louise, de Gustave Charpentier; “Toi!  Vous! N´est-ce plus mamain! De Manon, de Jules Massenet; “Meinne Lippensieküssen  so heiss”, de Guidita, de Franz Lehar y “Heia! In den Bergen, de  Emmerich Kalmán. La “Barcarola” de los Cuentos de Hoffman, de Jaques Offenbach  y  “Casta Diva”, de Norma, de  Vincenzo Bellini, fueron ofrecidos como bises.
      María Belén Rivarola se formó en la  Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional y ganó diferentes premios  (Selección de jóvenes estudiantes de música, organizado por el Mozarteum de  Santa Fe, Concurso internacional de ópera de San Juan y otros). Cantó numerosos  roles en distintos escenarios, en óperas tan diversas como Don Giovanni (Donna  Elvira); Los cuentos de Hoffman (Antonia) y muchas otras, en muy diversos  escenarios, en el país y el extranjero. Ha intervenido asimismo en la Gala  Zurich.
      En la oportunidad optó por obras con  requerimientos muy diversos: las canciones de Guastavino, en un fraseo lento y  detallado la llevaron desde la zona grave del registro a una continuidad de  pasaje al registro medio: la expresión surge de la calidez y densidad vocal que  el intérprete pueda aportar, particularmente en “Ya me voy a retirar”, quizás  la más sentida. En las obras más populares (Les Chemins De L´amour) por ejemplo  y en la bella “Meinne Lippensieküssen so heiss” el requerimiento surge en gran  medida de un francés que importa una suerte de ligadura de la frase y una  continuidad, y el contorno más tajante de los fonemas del idioma alemán, donde  cada sonido se diferencia. Uno de los mejores momentos fue su versión de Casta  Diva, en homenaje a la soprano catalana Monserrat Caballé.
      De cuidada técnica –hecho apreciable  por ejemplo en los pasajes a las distintas zonas del registro- y seguridad en  toda su amplitud vocal, María Belén Rivarola asume a la escena como un medio  absolutamente fluido, e inherente a ella, en una presencia cuya espontaneidad  se sostiene precisamente en su dominio técnico y expresivo.
      Miguel Silva Macías llevó a cabo sus  estudios en Mar del Plata, perfeccionándose en Italia y, actualmente, con el  maestro Gustavo López Manzitti, habiendo abordado distintos roles del  repertorio lírico, como Romeo (en Roméo et Juliette, de Charles Gounod) , Luigi  (en Il  tabarro, de Giacomo Puccini) y  otros. De sólido material vocal, en afinación y belleza de timbre,  particularmente en la zona media del registro, abordó con gran seguridad “E la  solita storia del pastore”, de Cilea y el dúo de “Toi! Vous! N´est-ce plus  mamain! De Manon, de Jules Massenet, así como el primer bis con la Barcarola de  los Cuentos de Hoffman.
      Horacio Soria es uno de los  elementos musicales más destacados de la ciudad: por la solidez de su  formación, su versatilidad en distintos géneros y por su enorme experiencia ya  sea como acompañante de cantantes, integrante de ensambles y solista en  formaciones jazzísticas.
      Desde 2015 María Paula González  –historiadora del arte- y Miguel Silva Macías vienen llevando a cabo su  iniciativa de organizar conciertos bajo el concepto de la tertulia camarística,  en ámbitos acordes a ese propósito, en una experiencia en la que han participado  destacados cantantes locales –como Georgina Espósito, Leopoldo Gaillour, Edith  Villalba, Facundo Gómez Manzano- y otros notables artistas como María José  Dulín, Rocío Giordano y Enrique Gilbert Mella. 
      Canciones como las de Carlos  Guastavino –tan ricas musicalmente como poco frecuentes- encuentran un marco  ideal en conciertos como el ofrecido en la Villa Gainza Paz.
      
      
      Eduardo  Balestena                 

