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Loable labor de la Sinfónica Nacional en el CCK

 

Sala Sinfónica del CCK

Viernes 5 de abril de 2019


Escribe: Néstor Echevarría  - (La Prensa 2019/04/07)


Orquesta Sinfónica Nacional

Programa:

“Obertura de “El cazador furtivo” de Carl Maria von Weber

“Concierto para violín y orquesta Nº2 en Re menor, op.22 de Henryk Wieniawski

Sinfonia Nº8 en Fa mayor,op.93 de Ludwig van Beethoven

Director: Mariano Chiacchiarini

Solista: Victoria Warzyca (volin)


Un meritorio sesgo se pudo advertir en el organismo sinfónico nacional en este comienzo de temporada, al presentarse  en la Sala Sinfónica del CCK con un programa variado, donde desfilaron partituras de diferente carácter y firmas, bajo la batuta  de Mariano Chiacchiarini, que a los treinta y seis años viene desempeñando una ponderable actividad al frente de la orquesta,con auspiciosos resultados en concursos internacionales también. Abrió el concierto con la célebre obertura de la ópera“Der Freischütz” (El cazador furtivo) de Carl Maria von Weber, a la cual otorgó acertados perfiles en sus aires románticos, logrando una traducción prolija en estilo y forma.


Un número singular de este programa fue sin duda el segundo Concierto para violín y orquesta en re menor op.22, del compositor polaco Hernryk Wieniawski,  nacido en la localidad de Lublin, Polonia , en 1835, formado en Paris, cuyos problemas de salud complicaron su carrera, hasta fallecer en suelo ruso, donde estuvo vinculado muchos años de su  vida , a la edad de cuarenta y cuatro años.


Dejó varias obras, siempre en música instrumental, pero de sus dos conciertos para violín y orquesta,  el que se presentó en esta ocasión es sin duda el mas requerido por la muestra de una  partitura exigente para el instrumento solista (cabe acotar que el autor era un destacado violinista), que  aparte de la instancia técnica , también se muestra expresivo, lo cual llevó a esta composición en tres tiempos  que se cierra con un “ allegro” enfático (con brio, está indicado), al que continua  otro “allegro moderato alla zíngara”.


Y allí se lució la participación de la juvenil violinista  de dieciocho años Victoria Warzyka, proveniente de una familia de la colectividad polaca en nuestro país, que mostró enjundia, sólido manejo del instrumento e identificación con el espíritu del compositor, agregando tras los nutridos aplausos, el segundo “Capriccio” (en Si menor, moderato) del legendario Nicoló Paganini.


Finalmente, cerrando el concierto, la conocida Sinfonía en Fa mayor Nª 8, op.93, del genio de Bonn, Ludwig van Beethoven, surgió noble y con acertada métrica y expresivos contrastes, corroborando cuanto señalamos en el comienzo, lo de una esperada muestra de crecimiento de los integrantes del organismo en sus diferentes secciones, lo que genera expectativas futuras, tomando en cuenta la enorme tradición de la orquesta que representa a la Secretaria de Cultura de la Nación.

 

Néstor Echevarría

 

Calificación: Muy bueno