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Gran concierto a cargo de la Orquesta de Cámara del Congreso de la Nación y el Polifónico Nacional en el CCK

 

DISTINCIÓN SONORA Y ELEGANCIA INTERPRETATIVA

Auditorio Nacional

Jueves 18 de julio de 2019


Escribe: Martha Cora Eliseht

 

El pasado jueves 18 del corriente se llevó a cabo en el Centro Cultural Kirchner (CCK) una presentación de la Orquesta de Cámara del Congreso de la Nación en forma conjunta con el Coro Polifónico Nacional, bajo la dirección de José María Sciutto, donde se interpretaron las siguientes obras: la Serenata para cuerdas en Sol mayor “Una pequeña música nocturna” (Eine Kleine Nachtmusik), K. 525 de Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791) y la Misa para orquesta, coro y solistas “Theresienmesse” n°12 (Hob.XXII/12) de Joseph Haydn (1732-1809), con la participación de los siguientes cantantes: Silvina Petryna (soprano), Griselda Adano (contralto), Gonzalo Llanes Mena (tenor) y Alejandro Spies (bajo).


En bien conocida la labor de Sciutto como Director Estable del Coro Polifónico Nacional y, en esta oportunidad, también dirigió la orquesta. Hay que recordar que Sciutto comenzó sus estudios como director de orquesta en la Universidad Nacional de La Plata y posee una amplia experiencia como tal tanto en el país como en el exterior. Y como director coral, previamente a su designación como Director del Polifónico, ejerció funciones en el Teatro Lírico Ventidio Basso de Ascoli y como Director del Laboratorio Corale de la Academia Santa Cecilia de Roma. Por ende, se lo pudo apreciar en ambas funciones. Ofreció una interpretación vibrante, cristalina y chispeante de la celebérrima obra de Mozart, con un equilibrio sonoro perfecto por parte del prestigioso organismo que dirige Sebastiano De Filippi. Eine Kleine Nachtmusik (Una pequeña música nocturna) es la obra más conocida y más representada de Mozart en todo el mundo y forma parte del habitual repertorio de música de cámara. Sus cuatro movimientos (Allegro/ Romance: Andante/ Minuetto: Allegretto y Rondo: Allegro) fueron ejecutados con maestría y un sonido puro y delicado.


Para la segunda parte del concierto, se incorporaron músicos de organismos sinfónicos oficiales: los clarinetistas Gonzalo Morales Sánchez y Marianela Figlioli y el trompetista Ezequiel Oreste (Orquesta Nacional de Música Argentina “Juan de Dios Filiberto”); el timbalista Martín Diez Olea y el trompetista Gerardo DelleVille (Orquesta Sinfónica Nacional), mientras que Daniel Santoro se desempeñó en órgano para interpretar la Misa para solistas, coro y orquesta n° 12en Si bemol mayor de Haydn. Fue compuesta en 1799 y dedicada a la emperatriz María Teresa de Austria –de ahí el nombre de “Theresienmesse”- y se encuentra dentro del grupo XXII del catálogo de Anthony van Hoboken, que agrupa toda la obra del eminente músico austríaco por categorías, y no por orden cronológico en el cual fueron compuestas las obras. Haydn compuso 14 misas, de las cuales, 5 de ellas (9 a 14) fueron por encargo de la familia Esterházy, y entre las cuales se halla la Theresienmesse. Como todas las misas, se divide en las siguientes secciones: Kyrie (Adagio/Allegro), Gloria (Allegro), Credo (Allegro), Sanctus (Andante), Benedictus (Moderato) y Agnus Dei (Adagio/Allegro).A su vez, y con excepción del Kyrie, cada una de las secciones se subdivide en diferentes fragmentos: por ejemplo, el Gloria posee tres fragmentos: Gloria in excelsis Deo, Gratiasagimus tibiy Quoniam tu solus Sanctus, donde deben cantar los 4 solistas principales en canon para dos grupos de voces - soprano/contralto y tenor/bajo-. A su vez, el Credo se divide en 4 secciones: Credo en unumDeum, Et incarnatusest, Et resurrexit y Et vitamventurisaeculi(Vida por los siglos de los siglos). En esta versión, se logró no sólo un equilibrio perfecto entre orquesta, solistas principales y coro, sino que se logró una versión que sobresalió por la exquisitez y elegancia interpretativa de los cantantes. Con excepción de Alejandro Spies –integrante desde hace muchos años del Coro Polifónico Nacional-, el resto de los solistas también son integrantes del Polifónico, pero que ingresaron durante este último año. Por ende, era la primera vez que los periodistas especializados pudieron apreciar la labor desempeñada por Silvina Petryna y Gonzalo Llanes Mena. Esta joven soprano lírica posee una bellísima voz y una excelente coloratura, que le permitió ejecutar los pasajes más arduos sin dificultad. Lo mismo sucedió con el tenor, donde logró una perfecta combinación vocal junto al bajo. Griselda Adano es una talentosa contralto, que una apreció en roles de ópera y que puso su espléndida y melodiosa voz al servicio de esta bellísima misa, que, desgraciadamente, se ejecuta muy rara vez en los programas de conciertos. Naturalmente, la perfecta acústica de La Ballena Azul y el Coro fueron el marco perfecto para lograr una versión sublime y exquisita, bajo la magnífica dirección –por partida doble- del Maestro Sciutto. El numeroso público que se dio cita esa noche en el CCK estalló en aplausos hacia el final del concierto.


Luego de la aparición del Coro y previamente a la ejecución de la obra de Haydn, los delegados del Polifónico Nacional –Enrique Folger y Soledad de la Rosa- mencionaron la crítica situación que está atravesando el Teatro Municipal de Santiago de Chile como consecuencia de las políticas de ajuste, con el despido y suspensión de 43 integrantes de los cuerpos estables del mencionado Teatro. Por lo tanto, los integrantes del Coro exhibieron sus carpetas  mostrando la frase “SOLIDARIDAD CON EL TEATRO MUNICIPAL DE SANTIAGO DE CHILE”, gesto que fue muy aplaudido por el público. Una espera que las consecuencias de “la política de la tijera” no se repiquen por estas pampas para poder seguir disfrutando de estos conciertos que son auténticas joyas sonoras, interpretados por artistas locales de alto nivel y gran jerarquía.