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CIERRE ACORDE A LA JERARQUIA DE LA TOTALIDAD DEL CICLO

 

Teatro San

Sala Antonio Cunill Cabanellas

Lunes 27 de enero de 2020

 

Escribe: Donato Decina

 

 

Festival Internacional de Buenos Aires 2020.

Ciclo de Conciertos de Música Contemporánea del Complejo Teatral de Buenos Aires 2019/20 (Segundo Movimiento). Concierto de Clausura.

Actuación de la “Compañía Oblicua” (Sergio Catalán [Flautas], Javier Mariani [Clarinetes], Diego Ruíz [Piano], Gonzalo Pérez [Percusión], Elena Buchbinder [Violín], Fabio Loverso [Violonchelo], Lucía Lalanne [Soprano]).

Dirección: Marcelo Delgado.

Programa: Obras de Proscia, Delgado y Halac en estreno mundial (La primera y la última de las obras fueron comisionadas por el Ciclo).  

 

NUESTRA OPINION: EXCELENTE.

 

La vigésimo tercera edición del Ciclo de Conciertos de Música Contemporánea llegó a su fin con una extraordinaria sesión en la que la “Compañía Oblicua” que dirige Marcelo Delgado fue la protagonista excluyente para un programa que ofreció tres estrenos mundiales de creadores argentinos, dos de los cuales fueron encargos del ciclo.

 

  Martín Proscia (quien además es saxofonista e integra el cuarteto “Tsunami”, el que participó también de esta edición), el propio Delgado y José Halac, cada uno con una obra fueron los compositores sobre los cuales giró la programación. Obras que exigen esfuerzo, mucha preparación y concentración para que el producto haya llegado lo más fielmente posible al público.

 

  Del primero de los mencionados se estrenó “Los Pichiciegos de Plaza de Mayo”. Inspirado en el título de un trabajo de Rodolfo Fogwill y partiendo de un acorde de una canción de Luís Alberto Spinetta, Proscia desarrolla una sonoridad que evoluciona hasta alcanzar una total intensidad. La labor de todos los instrumentistas fue encomiable. Algunos instrumentos como el piano lo hacían con su encordado preparado, los vientos que partieron de un simple soplido, la percusión de fuerte intervención, el apoyo de la electrónica para remarcar pasajes y hasta la presencia de un cronómetro que por dos veces evidentemente indicó las duraciones para parte de los momentos más intensos de la obra. Delgado condujo a pulso firme la obra, la que inició de esta forma un camino ascendente a lo largo de la noche.

 

  Del propio Delgado se escuchó “Una y Otra Vez”, a la que definió como los intentos para lograr el producto final, lo que finalmente ocurrió y tomo forma de obra. Aquí también se pudo percibir el camino desde las sonoridades más bajas hasta los momentos más intensos. Podría decirse que son ciclos que se desarrollan y adquieren unidad sobre el final y aquí también la electrónica va en apoyo de la música interpretada en vivo, la que requiere de los músicos el empleo de efectos producidos con sus propios instrumentos. Delgado está en plena madurez creativa y la solidez de este trabajo es la prueba más elocuente.

 

  Y el cierre vino de la mano de “Caminos del Espejo” de José Halac, quien toma como base un poema de Alejandra Pizarnik para desarrollar la música. Obra de una intensidad poco común requiere desde un violonchelo que se interpreta desafinado, piano preparado, amplia percusión, violín y vientos que producen melodías, electrónica y fundamentalmente la voz de una soprano, la que expresa desde la declamación con pasajes de marcada intimidad, pasando por una línea media de voz con melodía muy cuidada y llegar en varias ocasiones hasta el grito para poder transmitir el texto de Pizarnik. Allí emergió triunfal Lucía Lalanne con una labor descollante desde la entrega física, actoral y vocal. Es una intérprete consumada y su labor fue consagratoria. Delgado logró las mejores respuestas de los miembros de la “Oblicua” y la obra fue estupendamente recibida.

 

  Ha sido un cierre acorde a la mejor tradición del ciclo y es remarcable el hecho de que se comisionen estrenos, con lo que esto significa para los creadores argentinos. Sumado al formidable “Primer Movimiento” de finales de 2019, nos da un resultado de excelencia y hago votos para que ello se mantenga en el futuro.

 

Donato Decina