Muy buena versión en Belgrano
"La Traviata" de Giuseppe Verdi
Auditorio de Belgrano
Domingo 10 de Mayo de 2015
Escribe: Andrés Hine
Opera e 4 Actos
- Música - Giuseppe Verdi-
- Libretto - Francesco Maria Piave
Elenco:
Violetta: Rocío Cereceda (Soprano)
Alfredo: Sebastián Russo (Tenor)
Germont: Fernando Grassi (Barítono)
Flora: Virgina Scavino (Soprano)
Annina: Sol Crespo (Soprano)
Gastone: Gastón Efficace
Coral Ensamble
Orquesta del Ensamble Lírico Orquestal
Dirección Musical- Dante Ranieri
Dirección Escenica – Raul Marego
Escenografía: Daniel Feijóo
El Ensamble Lírico deleitó a melómanos, y al público en general, con una muy buena versión de La Traviata. A pesar de no tener los recursos de otras entidades, ofrece sólidas y atractivas funciones, con puestas simples pero efectivas y bellos vestuarios, pero dedicando el principal esfuerzo a la faceta musical que, al fin y al cabo, es el corazón de cualquier ópera.
El Auditorio de Belgrano, aunque con buena acústica, no está diseñado para puestas de ópera, lo cual conduce a dificultades desde el punto de vista escénico. Estas fueron bien resueltas por Daniel Feijóo y Raúl Marego. El vestuario a cargo de Mariela Daga fue de elegante confección acorde con el período de la obra y aporto de manera significante al éxito de producción.
Rocio Cereceda como Violetta demostró un timbre muy agradable, bellos pianísimos y agudos y un caudal adecuado que produjeron impacto en el oyente. Sebastián Russo como Alfredo cantó con voz potente, excelente línea de canto y buena presencia escénica. Fernando Grassi como Germont cantó con muy buen volumen, habilidad técnica y afinación, resolviendo con facilidad los pasajes más comprometidos, aportando su distinguida calidad actoral. Virginia Scavino como Flora desplegó canto elegante y claridad vocal.
El Coral Ensamble ya acostumbró a los habitués del Ensamble Lírico Orquestal a presentaciones donde demuestran un rendimiento vocal de alta categoría, con precisión en las escenas de conjunto, rico en sonoridad y efectivo control de matices. En esta ocasión tampoco defraudaron.
La dirección de orquesta, bajo la batuta segura de Dante Ranieri, logró una completa integración con los cantantes. Al haber sido un tenor distinguido en nuestro ámbito, el Maestro Ranieri supo ponerse del lado de los cantantes y controlar la orquesta para que se desempeñe como acompañante y soporte en vez de sobrepasar en volumen a las voces.
Fue esta una versión que mantuvo el nivel de expectativa, bien lograda con excelente dirección musical y puesta en escena efectiva, un elenco de calidad con intérpretes primarios que superaron holgadamente las dificultades de la partitura.