En la última Presentación de la temporada 2016 del Ensamble Lírico Orquestal
Apasionada versión del magnum opus de Beethoven
Auditorio de Belgrano
Domingo 30 de Octubre de 2016
Escribe: Andrés Hine
Ludwig van Beethoven - Sinfonía No 9 en re mayor, opus 125 "Coral"
Orquesta Sinfónica Municipal de Florencio Varela
- Director: Dario Dominguez Xodo
Coral Ensamble
- Director: Gustavo Codina
Solistas:
-Carla Filipcic Holm, soprano
- Nora Balanda, mezzosoprano
- Duilio Smirglia, tenor
- Enrique Gibert Mella, bajo
En el ámbito del espacioso Auditorio de Belgrano se realizó el último espectáculo de la temporada organizada por el Ensamble Lírico Orquestal. En esta oportunidad, se presentó la famosa Sinfonía Número 9 'Coral', de Ludwig van Beethoven.
La sinfonía fue originariamente compuesta por encargo, para la Sociedad Filarmónica de Londres en 1817. La mayor parte fue realizada entre el otoño de 1822 y febrero de 1824. El compositor se basó en parte, en otras composiciones suyas que eran piezas completas y a su vez, en cierta forma, bocetos para la futura sinfonía. Una de éstas es la Fantasía Coral Op. 80 que consiste esencialmente en un movimiento de un concierto para piano que introduce un coro y solistas hacia el final para crear un clímax y, como en la Novena, las fuerzas vocales cantan un tema que había sido presentado por los instrumentos.
El último movimiento de la Coral se caracteriza por ser casi un concierto dentro de un concierto, donde se recapitulan brevemente los temas de los primero tres movimientos, intercalados por pasajes de los violoncellos que parecen decirle a la orquesta que esa melodía ya se había tratado y es hora de probar algo distinto. Después de la tercer interrupción estos instrumentos sugieren algo nuevo, introduciendo asi el tema de la famosa 'Oda a la alegría' que luego es cantado por el bajo, los demás solistas, el coro y finalmente toda la orquesta, sugiriendo al oyente de que todos se han puesto de acuerdo acerca de la alegría y optimismo que dominará la obra de ahora en adelante. Siguen otras tres 'variaciones' en forma de scherzo, movimiento lento y un fugato, culminando con una recapitulación de la primera parte de la oda y un finale prestissimo.
La versión brindada por el Ensamble Lírico Orquestal contó con la batuta del maestro Dario Dominguez Xodo, quien evidenció buena dinámica, tempo giusto y variaciones interesantes en expresividad. Sin embargo en algunas ocasiones se pudieron notar desajustes en tonalidad y algunas entradas y afinación imprecisas por parte de la Orquesta Sinfónica Municpal de Florencio Varela. Este organismo cuenta con un cuerpo de instrumentistas muy jóvenes y entusiastas que una vez pulidos estos aspectos, tienen mucho para brindar.
Pero sin duda, la parte más destacada de la función comenzó con la entrada del barítono Enrique Gibert Mella, con voz poderosa y sonoridad rotunda, confiriendo autoridad y prestancia a su intervención. En tanto, la belleza tímbrica de Carla Filipcic Holm fue notoria apenas hizo su primer aporte a la obra. Su técnica sólida, gran caudal, bello color vocal e interpretación estilística impecable fueron un deleite para los oídos. El tenor Duilio Smiriglia mostró bello esmalte y canto seguro, aunque no siempre tuvo el caudal adecuado. La mezzo Nora Balanda cantó con corrección una parte que no le brinda mayores posibilidades de lucimiento.
El Coral Ensamble, bajo la dirección de Gustavo Codina, se destacó por su coordinación y sincronización, equilibrio sonoro y de tonalidad. No se trata meramente de un grupo de cantantes, sino de una unidad integrada que sabe coordinar las voces individuales para producir un resultado de gran belleza, dentro de las pautas esperadas por una obra de esta envergadura.
Al finalizar, la sala colmada demostró su agradecimiento a los intérpretes y al Ensamble Lírico Orquestal que de esta manera, no sólo culmina la actual temporada sino que además, cumple su décimo quinto aniversario realizando una labor que pone al descubierto su alto nivel profesional.
