EL CRECIMIENTO DE UNA NOTABLE DIRECTORA
Sala Sinfónica del CCK
Viernes 21 de junio de 2019
Escribe: Donato Decina
Orquesta Nacional de Música Argentina “Juan de Dios Filiberto”
Directora Invitada: Lucía Zicos
Solistas: Lucrecia Jancsa (Arpa), Armonía Opus Trío (María Marta Ferreyra (Fagot), Fanny Suarez (Piano), David Lheritier (Clarinete)
Programa: Obras de Zorzi, Montero, Herrerías y Gómez Carrillo
NUESTRA OPNION: MUY BUENO.
Muchas veces Ud. Como espectador/oyente y en mi caso como cronista nos preguntamos el por qué no se incluyen más seguido determinadas obras de compositores Argentinos, como así también de autores Nacionales actuales con los que se siente alguna clase de identificación. Pues bien, mucho de esto ocurrió en este concierto, en donde la Filiberto una vez más dió prueba de sobradas personalidad y valía, afrontando un programa compuesto por notables creadores Argentinos y otros que pretenden serlo y van camino a ello.
El concierto fue confiado a Lucia Zicos, reciente premio Estímulo de la Asociación de Críticos Musicales de la Argentina. Oriunda de Avellaneda, interprete de Viola, prosiguió sus estudios de Dirección Orquestal bajo la guía de Guillermo Scarabino en la Facultad de Artes y Ciencias Musicales de la U.C.A., en la que hoy es catedrática de la misma. Formadora de una Orquesta Joven en Avellaneda, asistente de la hoy Academia Orquestal del Teatro Colón, comenzó a recorrer un extenso camino de casi dos décadas como conductora. Muchos de Uds. recordarán su concertación de “Loreley” de Alfredo Catalani para la Casa de la Opera de Buenos Aires en el Teatro Avenida lógicamente con Adelaida Negri en el protagónico. Días atrás se presentó en los Conciertos del Mediodía del Mozarteum estrenando una Obra de Cláudia Montero, de la que también se escuchó una obra suya en este concierto y que el próximo 27 estrenará otra más, encargo de la Filarmónica en el Colón.
Justamente si hubo una arista saliente en esta velada fue el crecimiento de Zicos como interprete. Guió con inteligencia, con plena expresividad gestual y logró del conjunto respuestas por momentos formidables. Su entendimiento con todos los solistas participantes de la programación fue total y todas las versiones tuvieron pleno equilibrio.
Una obra por muchísimo tiempo ausente de los atriles de Ntras. Principales orquestas es “Música para Calesita” del inolvidable Juan Carlos Zorzi. Obra que es una invitación a recordar los tiempos “de Pibe”, pinta como pocas aquel Buenos Aires de los Años cincuenta del pasado siglo y el ritual de concurrir a la calesita de la plaza los fines de semana. Por momentos descriptiva, por momentos melancólica. Orquestada para vientos y percusión a partir de su original para dúo de pianos, Zicos logró llegar hasta el fondo de la página con total autoridad. Los integrantes de la Filiberto lucieron ajustados en todo momento. En la Obertura (Primero de los cuatro números del trabajo que se repite al final como cierre), algún bronce sonó de manera despareja, cosa luego corregida en la mencionada repetición final.
Dentro de los tres compositores que últimamente presentan trabajos de modo continuo, Claudia Montero se encuentra entre Ellos. Aquí la Filiberto presentó ”Mágica y Misteriosa Buenos Aires”, un concierto para Arpa y Orquesta de Cuerdas dedicado a Floraleda Sacchi. Lucrecia Jancsa, la extraordinaria Arpista Argentina, solista de la Sinfónica Nacional, asumió la interpretación de su instrumento. Tres son sus movimientos, el primero un Risoluto de estilo claramente “Piazzoleano”, un “Molto Espressivo” muy llamativo, de corte clásico, tomando como molde la Orquesta típica de los años cincuenta, aún cuando si hubiese que dar un nombre, yo me acercaría al de Raúl Garello, el que si bien tuvo su esplendor por los años setenta, su formación remite a los años cincuenta justamente. El “Preciso” que cierra la obra se inicia de manera vertiginosa para luego recapitular con el Risoluto inicial. Obra muy bien escrita, encontró en Jancsa a la interprete ideal. Tuvo magnífica sonoridad, lirismo, delicadeza y los pasajes más comprometidos los abordó con limpieza de sonido absoluta. Tuvo en Zicos a una aliada con la que mantuvo un ida y vuelta permanente. Las Cuerdas de la Filiberto a partir de Brigitta Danko su Concertino Titular hasta el último instrumentista dieron brillante respuesta con pasajes de bellísimo sonido.
Luego fue el turno para el Armonía Opus Trío que integran María Marta Ferreyra en Fagot, Fanny Suarez en Piano y David Lheritier en Clarinete, quienes junto a la Orquesta estrenaron el concierto que para Este Conjunto y Orquesta compusiera Mario Herrerías, lamentablemente fallecido el año pasado. Se trata de una muy interesante composición en un solo movimiento que trasunta un cierto aire “Bartokiano” en su inicio, la que va virando a rasgos inconfundiblemente porteños con un inteligente tratamiento de la Orquesta y una interesante escritura para el Trío solista. El Armonía Opus Trío se “floreo” en la interpretación, sentido homenaje que efectuaron al Compositor. Zicos logró llevar a la interpretación a un justo equilibrio, ganando todos aquí el mayor aplauso de la noche, lo que motivo que el Conjunto Solista brindara el arreglo de José Bragato de “Tres Munitos con la Realidad” de Astor Piazzolla a modo de Bis.
El cierre trajo a los atriles “Fiesta Criolla” de Manuel Gómez Carrillo. En mi caso particular, debí escuchar esta obra en el Colón y por la Filarmónica de Buenos Aires hace ya 36 años como homenaje al compositor de quién en ese año se cumplia el Centenario de su nacimiento. Aparentemente un problema dematerial de orquesta impidió que sea interpretada. Lo cierto es que hasta esta velada, jamás tuve oportunidad de escucharla. Es un trabajo en cuatro movimientos, el que tiene en comun con el inicial de Juán Carlos Zorzi y también con la Obra de Claudia Montero, que repite al cierre su número inicial, el que recrea el clima festivo en el Interior de Nuestro País. Gómez Carrillo pintó como pocos a Santiago del Estero (Paradojas del destino, ese mismo año del centenario de su nacimiento la “Rapsodia Santiagueña” fue interpretada por la Sinfónica Nacional bajo la Dirección de…..Juan Carlos Zorzi). Zicos logróllevar la expresividad al máximo, logrando que la Orquesta se soltara por completo y luciera cómoda a lo largo de toda la obra. Ha logrado un crecimiento interpretativo extraordinario y es de esperar que podamos verla mas a menudo dirigiendo. Sin duda lo merece.
Donato Decina