La Orquesta de Cámara del Congreso de la Nación volvió a la presencialidad
Un concierto para disfrutar
Salón de los Pasos Perdidos
Congreso de la Nación
Lunes 30 de agosto de 2021
Escribe: Graciela Morgenstern
Fotos: Gentileza Congreso de la Nación
El Inca y la Doncella
Orquesta de Cámara del Congreso de la Nación
Director: Sebastiano De Filippi
Programa:
- “Cantos Populares Incaicos”, de Luís Gianneo. ”Himno al Sol” , “Marcha del Inca” (Andante moderato), “Huayñu” (Lento y nostálgico) , "Danza aymará” (Moderato).
- "La Muerte y la Doncella", de Franz Schubert. Edición de Sebastiano De Filippi del cuarteto Nº 14 en Re menor, D.810 I. Allegro, II. Andante con moto, III. Allegro molto scherzo, IV. Presto
Con una muy buena actuación, la Orquesta de Cámara del Congreso de la Nación, bajo la batuta de su director titular, Sebastiano De Filippi, volvió a presentarse en forma presencial en el Salón de los Pasos Perdidos. Las personas que no tuvieron acceso al concierto, ya que la capacidad estuvo limitada por las medidas de protocolo sanitario, pudieron seguirlo online, en tiempo real.
La velada comenzó con “Cantos Populares Incaicos”, obra para cuerdas del compositor argentino Luís Gianneo. La misma está compuesta de cuatro partes. El ”Himno al Sol” (Largo), la “Marcha del Inca” (Andante moderato), “Huayñu” (Lento y nostálgico) y "Danza aymará” (Moderato). De Filippi realizó una interpretación muy bien lograda de cada una de estas partes, desde lo profundo de la primera, pasando por la diáfana transparencia musical de “Huayñu”, dirigiendo con energía y expresividad durante toda la extensión de la obra.
En la segunda parte se interpretó el Cuarteto Nº 14 en Re menor, D.810 “La Muerte y la Doncella” de Franz Schubert, en transcripción del mismo De Filippi, ejecutado de manera encomiable, con todas sus repeticiones, destacándose por el equilibrio logrado en la impronta que la batuta brindó a cada uno de sus movimientos. No faltó precisión en los tiempos, ni nervio, ni entrega. Los integrantes de la orquesta estuvieron plenamente consubstanciados con su director y realizaron una labor de notable relevancia.
Un aspecto negativo fue las molestias causadas por ruidos de gente que hablaba en voz alta durante el transcurso del concierto, a lo que se sumaba, la manipulación de elementos metálicos que desconcentraban tanto a los músicos como al público. Lamentablemente, cotejando luego, con el video, claramente se trataba de empleados del Congreso mismo.
A pesar de eso, quedó claramente expuesto que tanto la Orquesta de Cámara del Congreso como Sebastiano De Filippi ostentan alta jerarquía artística.
Fue un concierto para disfrutar
CALIFICACIÓN: MUY BUENO